Son el medio por el cual se lee el número contenido en una credencial para luego enviárselo a través de un protocolo (Wiegand, ABA, RS-232) a una controladora. Estos números contenidos en las tarjetas pueden estar en diversos formatos, y la controladora que se utilice debe ser capaz de interpretarlo.
Las tarjetas y lectores deben ser compatibles tanto en frecuencia (Ej.: 125 KHz, 13.56 MHz), como en tecnología aplicada (HID, iClass, Indala, EM-Marin, Mifare, etc.).
La identificación por radiofrecuencia (RFID) tiene un costo medio, alta robustez y duración, complementada con la
credencialización permite brindarle un documento interno de la organización a cada persona.